
El Caballero Oscuro es la segunda parte de la trilogía que desarrolló
Christopher Notan sobre el personaje de Batman, tras Batman Begins y antes de La
Leyenda renace. El Caballero Oscuro,
para el que esto escribe, es la mejor de las tres. Es más, puede ser
considerada como la gran adaptación que se ha producido del mundo de las viñetas
al mundo cinematográfico, con las dificultades que esta empresa implica. Los
mimbres con los que disfrutaba Nolan sólo podían crear un gran canasto, que fue
lo que finalmente sucedió. Christopher Nolan, responsable de joyas como Memento, dirige la función con un gran
pulso narrativo, creando escenas que resultan absolutamente maravillosa. Pero
el reparto está a la altura del director: Christian Bale como Batman, Heath
Ledger como Joker, Aaron Eckhart como Harry Dent/Dos Caras, además e Maggie
Gyllenhaal como Rachel, Gary Oldman como James Gordon, Michael Caine como
Alfred, Morgan Freemano com Lucius Fox y Eric Roberts como Salvadore.
La virtud de toda película que se
precie es el modo en que el director juega con el espectador a su antojo, algo
muy común dentro de la filmografía de Christopher Nolan como es el caso de El Prestigio o Memento u Origen. A
diferencia de otros grandes directores que al dirigir grandes producciones
fracasaron ya sea comercial o artísticamente, como el caso de Shyamalam durante
su etapa oscura, Christopher Nolan se encuentra cómodo en este tipo de
producciones de alto presupuesto sin que merme en absoluto su creatividad y talento.
Igual ocurría con Alfred Hitchcock, Stanley Kubrick o Martin Scorsese que hacen
películas de un complejo contenido pero, a su vez, muy comerciales. Christopher
Nolan coloca al cine de superhéroes en
un nivel superior de calidad cinematográfica. Hoy en día los grandes estudios invierten
mucho dinero en este tipo de películas. Pero es un hecho muy reciente, y esto
es debido en buena medida por la influencia de Christopher Nolan. Quizás una de
las pioneras fue la película de Spiderman
de Sam Raimi del año 2001, aun siendo un producto menor de entretenimiento, sin
grandes reflexiones filosóficas y careciendo del punto de madurez y de seriedad
que, sin embargo, sí que tendrá El
Caballero Oscuro. Nolan desarrolla su propia visión del superhéroe, aunque
no por ello es infiel al mundo de los cómics. Batman, no es sólo un superhéroe
sino que es una con problemas y dudas que cuestiona la moralidad de la justicia
que impone. El gran mérito de Nolan, sin lugar a dudas, es que asume la
mitología del mundo del cómic de Batman y se lo lleva a convertirlo en una historia
de cine negro clásico como El Sueño
Eterno o El Halcón Maltés, ambas
protagonizadas por Humprey Bogart. El
Caballero Oscuro toma lo mejor de los cómics de Batman y lo convierte en
una película. Hay momentos de El
Caballero Oscuro que son cercanos al cine de terror, como ocurre cuando
aparece Joker.
La película es un punto de inflexión en la filmografía de Christopher Nolan,
considerada para muchos como su mejor película. Batman Begins, el primero de la saga, era una gran película sobre
el personaje de Batman, pero no está a la altura de El Caballero Oscuro pues aquí el personaje es Batman en toda su
dimensión desde el comienzo. Batman
Begins funcionó muy bien a la hora de introducir el personaje, cómo se
vuelve un superhéroe, cómo aprende las artes marciales, cómo se introduce en el
mundo de Gotham. Nos muestra a Bruce Wayne que tras la muerte de sus padres
viaja por el mundo para poder encontrarse a sí mismo. Aunque no tuvo todo el
éxito taquillero propio del personaje que nos ocupa, debido seguramente por la
profunda decepción que generó la anterior Batman
y Robin de 1997 con George Clooney y Arnold Schwarzenegger.
La película fue criticada por muchos seguidores del personaje no es
absolutamente fiel a los cómics. ¿Esto
constituye realmente un inconveniente? Hay que tener en cuenta que el cine
y el cómic constituye dos universos distintos. Yo pregunto: ¿A quién le importa que este Batman no sea idéntico al Batman de los
cómics? En este universo cinematográfico creado por Nolan todos los
personajes se complementan con suma precisión, además, como he señalado antes,
recogiendo la esencia de los personajes del cómic. Además, una persona del
talento de Nolan no podía limitarse a adaptar un simple cómic sino que lo
interpreta para adaptarlo a su propio universo cinematográfico.
El guión está perfectamente escrito con una complejidad argumental en la
que todos los cabos acaban bien atados. La historia tiene como centro
neurálgico a Bruce Wayne/Batman, como era de esperar, pero los personajes de
Joker, sobre todo éste, y Dos Caras tienen también gran protagonismo. Y éste es
uno de los grandes méritos del guión pues: no era fácil repartir el tiempo en
pantalla de todos estos grandes personajes del cómic. Pero también está el
personaje de James Gordon, interpretado por Gary Oldman, perfectamente
desarrollado. La película entrelaza estos personajes y sus historias de manera
fluida y natural, sin crear complicaciones argumentales de ningún tipo. Como
espectadores, nos sentimos igualmente cómodos viendo a Batman, a Joker o a Dos
Caras sin que sintamos en absoluto que nos estemos desviando del centro
argumental. El argumento de nuestra película gira en torno a como Batman lucha
contra el mundo del crimen de Gotham. Los grandes capos de la mafia contratan a
Joker para hacer frente a Batman. ¿Quién
es Batman? Batman representa un ideal de justicia que inspira a muchas
personas desde los dobles de Batman que pretenden acabar con el crimen de la
ciudad hasta la propia policía, en el caso de Gordon concretamente, que pondrá
en riesgo su propia vida a favor de su trabajo. Es un personaje que no le
importa qué medios utilizar, independientemente de la moralidad o no de los
mismos, si sirve para alcanzar su fin que es que prevalezca la luz de la justicia en Gotham por encima de la
injusticia. Filosóficamente encarna el ideal maquiavélico de que el fin justifica los medios. Nicolás
Maquiavelo en su obra El Príncipe establecía, a diferencia de Platón o de
Aristóteles, una distinción entre ética y política porque son dos disciplinas
autónomas que en diversas circunstancias pueden coincidir y en otras no. Lo
ideal sería que el gobernante (Maquiavelo lo llama príncipe) actuara en la
medida de lo posible respetando y obedeciendo los dictados de la moral, sin
embargo, en aquellos casos en los que no es posible para poder alcanzar el fin
deseado habrá que prescindir de la moral. Tal como mostró la anterior de la
saga, Batman Begins, o la película Joker Bruce Wayne pudo transformarse a
partir del dolor que sufre ante la muerte de sus padres. Es una persona
atormentada y que tendrá que viajar por el mundo para encontrarse a sí mismo y
desempeñar el papel que le corresponde. Este dolor hará engendrar en Batman el
deseo de que impere la justicia en la ciudad de Gotham, cueste lo que cueste.
El antagonista es Joker que es la pura representación del caos, carente de
reglas, dispuesto a todo para que en Gotham se desate una ola de locura. Heath
Ledger, que falleció justo después de la filmación de esta película, compone un
Joker a la vez fascinante y perturbador, tomando elementos propios de La Naranja Mecánica y Atraco Perfecto, ambas de Stanley
Kubrick. Recuerda mucho también a la interpretación de Brandon Lee en El cuervo de Alex Proyas, también fallecido a lo largo del rodaje
de esa película. En cierta medida la película se convirtió en un mito y en una
leyenda sobre todo a raíz de la muerte de Heath Ledger. Se trataba de un joven
actor de gran talento que todavía tenía un amplio recorrido. Joker
originariamente era Arthur una persona cuyo propósito era divertir a la gente.
Cada aparición de Joker tiene una construcción impecable, con grandes diálogos
y con cierta tendencia a la violencia como demostración de lo temible que puede
ser, incluso con momentos cómicos La presentación de Joker en un atraco a un
banco es apoteósica donde la tensión se palpa en cada fotograma.
En el Joker de Todd Philipps se
situaba al personaje en una situación de ambigüedad moral donde el espectador
podía empatizar y comprender hasta cierto punto las motivaciones del personaje
al responsabilizar a la sociedad de su origen personajes como Joker. Pero el
Joker de Heath Ledger la crítica no va contra la sociedad pues Joker no se
plantea su génesis sino que es directamente un factor de caos. El tono de
humanidad del Joker de Joaquin Phoneix ya no está en el Joker de Heath Ledger:
es imprevisible, hace las cosas pero sin una razón, porque quiere. Es como un
perro que persigue a los camiones, no sabría que hacer si alcanzara alguno. Este personaje representaría
en buena medida el ideal de la voluntad de poder que Nietzsche defiende en Así habló Zaratustra. Joker representa
el caos que es el rasgo más definitorio de la voluntad de poder de Nietzsche en
la que se define la realidad como caos y no como un cosmos: la realidad es un
conjunto infinito de fuerzas y contrafuerzas en permanente conflicto y sólo
prevalecen las que tiene un mayor poder. La realidad no es estática sino
dinámica y todo lo que pasa en ella no es nada que pueda ser valorado en
términos de bueno y malo de acuerdo con la moral tradicional, sino simplemente
que está más allá del bien y del mal. En esta voluntad de poder se enfrentan
indistintamente el orden de la razón y el caos del instinto y de la fuerza.
Ninguna de ellas tiene más importancia que la otra sino que se requieren
mutuamente para poder desarrollarse. Este conflicto inevitable entre razón e
instinto ha sido una constante en toda la filosofía de Nietzsche. En su primera
obra El origen de la tragedia por el espíritu de la música ya consideró el arte
trágico griego como un perfecto equilibrio de dos fuerzas antagónicas
representados por el Dios Apolo, que constituye el orden y la mesura y el Dios
Dionisos que representa el caos y la infracción del principio de individuación.
El equilibrio entre ambas fuerzas vitales se rompió a partir de las tragedias
de Esquilo donde prestó más importancia a los elementos de carácter racional a
través de la incorporación del coro. Esto se traduce en al ámbito filosófico en
Sócrates y Platón que son los primeros que afirmaron la razón como fuente de
conocimiento y negaron la validez del conocimiento sensible.
El otro lado del triángulo será Harvey Dent, un personaje que constituye el
punto de unión entre Batman y Joker y que representaría filosóficamente a
Sócrates y Platón Harvey Dent al igual que Batman hará lo posible para que
prevalezca la justicia pero cuestiona sus métodos y proceder para castigar a
los villanos. Su tótem es una moneda trucada con dos caras, un símbolo de orden
y de la seguridad, que no deja nada al azar. El dilema ético que plantea el
proprio Harvey Dent y que constituye el centro neurálgico de la película sería
el siguiente: ¿Gotham necesita a un
ciudadano para que haga prevalecer la justicia sin respetar las normas de una
sociedad democrática o dirigentes electos que sancionen a los infractores de la
ley pero de acuerdo con esa misma ley? Harvey Dent señala: Cuando el enemigo estaba en las puertas los
romanos abolían la democracia y elegían a un hombre para que protegiera la
ciudad. Y no se consideraba un honor sino un servicio público. Y continúa
Harvey Dent señalando que o mueres como
un héroe o vives lo suficiente para verte convertido en un villano. Y
Batman se ha convertido de este modo en un villano. Para Harvey Dent el emblema
de Gotham no puede ser ni Batman ni Joker, sino él mismo, una persona
aparentemente incorruptible. Esto es lo que nos muestra la película al
principio. Batman debería responder ante las leyes que ha infringido ante la
sociedad, pero no ante Joker. Representaría el Intelectualismo moral de Sócrates porque únicamente el conocimiento
de la virtud hace posible un comportamiento moral. Si conocemos el bien, hemos
de obrar rectamente y no es posible actuar mal a sabiendas.
¿Cómo es posible la transformación
de Harvey Dent, el honorable fiscal, en Dos Caras? Debido a la influencia de Joker, Harvey Dent se
transforma en Dos Caras suponiendo un cambio no sólo a nivel físico sino moral.
En la escena en la que Harvey Dent está en el hospital y aparece allí Joker
disfrazado de enfermera mantienen una conversación: Joker le explica su modo de
ser y cómo Gotham va a desembocar en el caos. Joker manifiesta lo siguiente: ¿De verdad tengo pinta de tener un plan?
¿Sabes qué soy? Soy un perro que corre detrás de los coches. No sabría qué
hacer si alcanzara uno. ¿Sabes? Actúo sin pensar. Joker parte de la premisa
de que en el mundo todo es caótico, no hay orden ni coherencia: A nadie le entra el pánico cuando todo
sucede de acuerdo con lo previsto, aunque lo previsto sea terrible. Si mañana
dijera a los medios por ejemplo que se van a cargar a un violador o que un
transporte de tropas va a volar por los aires, a nadie le entraría el pánico
porque todo iría de acuerdo con lo previsto. Pero si digo que un simple alcalde
va a morir, entonces la gente se vuelve loca. Instaura una pequeña anarquía,
altera el orden establecido y comenzará a reinar el caos. Soy un agente del
caos. ¿Y sabes lo que tiene el caos? Que es justo. Dos Caras, a diferencia
de Harvey Dent, está más próximo a Joker. Es una persona destrozada física y
moralmente pues ha quedado desfigurado y ha perdido el amor de su vida.
Es muy representativo el intento de Dos Caras por matar al hijo de James
Gordon y su enfrentamiento con Batman. Dos Caras señala: No se trata de lo que quiere hacer sino de lo que es justo. Tú creías
que podíamos ser hombres decentes en tiempos indecentes. Pero te equivocabas.
El mundo es como es. Y la única ética en un mundo cruel es el azar. Objetivo,
imparcial, justo.
Ante la pregunta de por qué Joker eligió a Harvey Dent, Batman le contesta:
Porque eras el mejor de los tres. Quería
demostrar que incluso alguien tan íntegro como tú podía corromperse. En
esto consiste la victoria de Joker.
La secuencia del interrogatorio entre Batman y Joker pone de manifiesto una
situación bastante equívoca desde un punto de vista ético. El espectador es
testigo de la paliza que Joker recibe por parte de Batman. Se ha pasado de la
justicia constituida y organizada de manera civilizada al ojo por ojo, a la
justicia tribal y a la venganza. Esto lleva a la siguiente paradoja: los
ciudadanos aparentemente civilizados, amantes de la ley y del orden acaban
recurriendo a un tipo de violencia ilegítima, incluso peor que mucha gente que
vive siempre en la ilegalidad. Joker nos demuestra que en el fondo nos
encontramos en una contradicción respecto a la justicia y su aplicación. Una
cuestión que podemos plantearnos es: ¿más
seguridad a costa de menos libertad o más libertad a costa de menos seguridad?
El espectador es puesto en tela de juicio: cada uno puede escoger su camino,
puede ser Joker o puede ser Batman. Mueres siendo un héroe o vives lo
suficiente para verte a ti mismo convertido en un villano. Batman nace de la
tragedia: ¿Gotham necesita a Batman y
Batman a Gotham? Es una relación de amor/odio donde hay una constante
lucha. Batman es pura contradicción.
El final es perfecto: es un desenlace en el que Batman reconoce que no es
el héroe que la ciudad necesita y hace un acto de sacrificio para convertirse
en un héroe de verdad. Convence a Gordon para que lo responsabilice de todos
los asesinatos de modo que Harvey Dent se convierta en un símbolo de la
justicia en Gotham, y nadie pueda saber el triunfo de Joker. Ahí radica la ambigüedad moral de Batman.